Gracias a la tecnología podemos cumplir una de nuestras ilusiones de niños: acercarnos un poco a la vida de Los Supersónicos. Si bien aún no contamos con una Robotina profesional que solucione hasta un corazón roto, es una realidad que ya podemos disfrutar del Internet de las Cosas, una vasta red de objetos inteligentes que se interconectan y permiten realizar ciertas acciones de manera autónoma. Aquí te contamos las ventajas de contar con un hogar digno de Einstein.

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Crear ambientes y escenas

Como si de una película se tratara, ahora puedes ambientar habitaciones. Existen herramientas que identifican tus gustos y necesidades para, por ejemplo, activar automáticamente la máquina de café cuando abres un ojo por la mañana, poner música suave para estudiar, o reconocer la presencia de personas y luego conectar la ventilación para que exista suficiente aire fresco.

Lo anterior lo debemos a la Domótica, que es la tecnología capaz de integrar y controlar aparatos a distancia desde nuestros dispositivos móviles. Una casa domótica tiene la particularidad de adaptarse al entorno y tomar decisiones como podría hacerlo uno mismo.

Eficiencia energética

Dependiendo de cómo uses la tecnología, puedes hacer que tu hogar sea más eficiente en el consumo de energía. Por ejemplo, controlar la climatización con un termostato programable que sugiera los mejores ajustes durante el día; o instalar persianas automatizadas que cambien a un modo nocturno cuando se pone el sol. De esta manera, nunca tendrás que preocuparte por desperdiciar energía.

Ahorro de dinero

Cuando dejamos que la domótica trabaje por nosotros, estamos haciendo la mejor inversión. Básicamente porque utilizas sistemas y electrodomésticos sólo cuando es necesario. Ya no despilfarras dinero en las luces que se dejan encendidas cuando no estás en casa, gastando en gasolina para conducir de vuelta porque olvidaste cerrar la puerta, o en reparaciones que puedes prevenir con sensores de incendio, inundaciones o humo.

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Seguridad y tranquilidad

Vivir tranquilo es vivir cómodo y en paz. Cámaras de vigilancia, detectores de movimiento y sensores para puertas y ventanas, nos dan la seguridad de tener canales de comunicación con el exterior e intercomunicación dentro y fuera de nuestra casa. Si vas de viaje, no será necesario pedirle al vecino que vaya a tu casa a regar el jardín: lo podrás hacer desde tu smartphone todos los días a la misma hora.

Como vemos, gracias a la capacidad de resolución de problemas y la autonomía de uso en los aparatos, los hogares inteligentes mejoran tu vida cuidando al planeta y a los tuyos al mismo tiempo.